Ese cuerpo de playa no se va a lograr solo, pero realmente me es difícil sólo renunciar a la comida italiana cerca de mi. Por suerte, descubrí que no es necesario sacrificar mis platillos favoritos, la clave está en el intercambio.
Cambiar los ingredientes más pesados de una receta italiana por otros más ligeros no cambia demasiado el sabor, ya que éste lo proporcionan las especias, aunque la textura sí puede ser diferente.
Eso sí, procuro reducir en lo posible mi consumo de postres; esa es la parte más difícil porque la repostería italiana es de las mejores que he probado, pero siempre puedo darme un gustito de vez en cuando.
Y para el día a día, las siguientes recetas siempre me brindan una comida completa, saludable y, sobre todo, deliciosa:
Setas horneadas rellenas de salchicha de pollo
Considera esta saludable cena italiana construida sobre una base rica en vitaminas: tapas de hongos portobello. Rellena con salchicha de pollo, verduras y queso, este platillo se hornea hasta que el queso se dore, revelando un platillo jugoso y sumamente apetecible.
Lasaña de ravioles
Reduce el tiempo de preparación e infunde aún más sabor en tu próxima cena de lasaña sustituyendo las capas de lasaña estándar por ravioles rellenos de verduras.
Las almohadas hinchadas aportan mucho sabor e incluyen un ingrediente extra que aporta nutrientes a tu receta: verduras como calabacín, zanahoria, entre otros que puedes cubrir con salchichas de pollo y montones de queso.
Combina esta receta saludable de pasta italiana con una ensalada de acompañamiento para una comida bien equilibrada de calidad de restaurante.
Corteza de pizza de coliflor
Entre la comida italiana cerca de mi, nunca puede faltar la pizza. Y si buscas reducir las calorías y los carbohidratos, prueba preparar tu pizza con una corteza de queso como base.
La textura es sorprendentemente parecida a la de la masa de pizza normal y puedes cubrirla con marinara, muchas verduras y una ligera pizca de queso.
Pollo asado italiano y mezcla de verduras
Un plato italiano sin gluten es posible. Prepara en una sartén pollo y verduras, asa y apila los ingredientes tostados en una cama de verduras de hoja verde. Rocía con una simple vinagreta balsámica, y la saludable receta de pollo italiano está hecha.
Saber que puedo tener comida italiana cerca de mi que además sea saludable es un gran alivio cuando busco cuidar mi alimentación sin tener que sacrificar los sabores que tanto me gustan, ¡te invito a intentarlo!
